Patricia Suárez Roggerone: «Con Co.Me buscamos mejorar la gastronomía de la provincia en todos sus aspectos»

A pesar de que se crío en una cocina, estudió artes plásticas. Unos años después decidió que su lugar estaba entre recetas y se inscribió en la carrera de gastronomía del Instituto Arrayanes. Actualmente es la chef del restaurante de Bodega Norton y una de las referentes de la provincia en su rubro. Además trabaja activamente en la Asociación de Cocineros Mendocinos (CO.ME), espacio del cual es una de sus fundadoras.





High: ¿Cuándo comenzaste en la cocina?


Patricia Suárez Roggerone: A los ocho años aprendí a cocinar. Mis padres eran cocineros. Mi papá por elección y mi mamá por accidente, porque terminó ahí junto a él a pesar de que no le gustaba mucho (risas). Ellos tenían un negocio familiar de viandas. Y después tuvieron un restaurante en el Club Barrio Cano que era un lugar muy típico de esa época, sobre todo los domingos.


H: Te criaste en una cocina…


PSG: Totalmente. Yo siempre digo además que la imagen que tengo de ellos en la cocina es como danzando, como si fuera una puesta en escena teatral. La cocina tiene un movimiento muy armónico y para mi es algo muy poético y artístico.


H: ¿Por qué no te decidiste por la gastronomía en primera instancia?


PSR: Cuando salí de la escuela secundaria comencé a estudiar artes plásticas en la Universidad Nacional de Cuyo. Cursé con muchos genios y tuve grandes profesores. Me recibí en cinco años. Pero seguía cocinando para comprarme los materiales de la facultad. Y por supuesto seguía dando una mano a mis padres en la cocina del negocio cuando hacía falta. Pero no visualizaba la posibilidad de ser cocinero profesional.  Siempre consideré que era una profesión muy sacrificada.


H: ¿Cómo te fue con artes plásticas?


PSR: Empecé como profesora dando clases en escuelas primeras y secundarias, pero no me gustó tanto. Lo que me interesaba más era dar clases en la universidad, pero me di cuenta de que eso iba a llevar mucho tiempo y la verdad es que necesitaba ganar dinero para mantenerme.  Ahí fue cuando pensé en estudiar gastronomía. Justo en ese momento estaba abriendo el Instituto Arrayanes y empecé a cursar. Tenía 29 años.


H: ¿Te resultó fácil estudiar gastronomía?


PSG: La verdad es que sí. Me movía como pez en el agua. Me daba cuenta de que tenía muchos conocimientos. Además la universidad me había aportado mucho en el sentido visual y estético y eso era muy utilizable en la cocina.


H: ¿En cuánto tiempo hiciste la carrera?


PSR: Fueron dos años y medio. Cursaba doble turno y por eso terminé más rápido. Y a partir de ahí comencé a transitar el camino de la cocina. Por suerte siempre tuve trabajo. El primer lugar adonde estuve por “180 Copas & Vinos” del sommelier Claudio Laciar. Era un trabajo muy divertido. Después estuve en varios lugares, entre ellos la cocina del hotel NH y el restaurante “Jalapeño”, el cual todavía funciona en Vistalba. También en “Las Negras” de Barrio Bombal y el de Chacras de Coria.   


H: ¿Cómo llegaste al restaurante de bodega Norton?


PSR: Me llamó Mariana Toledo, que era la chef de acá y comenzamos a trabajar.


H: ¿Tenías relación con el vino en ese momento?


PSR: Siempre me interesó el vino, pero la verdad es que en esa época no había tanto contacto entre los cocineros y las bodegas o los enólogos. Igualmente toda mi vida había venido a Norton a buscar las damajuanas de los jueves, por ende conocía la bodega. Comenzamos con el restaurante en el 2008 y lo armamos de cero. Yo era jefa de cocina.

H: ¿Tenías clientes mendocinos en el restaurante en ese momento?

PSR: Venían algunos. Igualmente cuando quedé a cargo del restaurante me di cuenta de que no podíamos trabajar solamente con turistas. Debido a eso diseñamos  un menú para mendocinos que es más barato y hoy continúa vigente. Lo tenemos todo el año y cuesta $ 250. Incluye una recepción, un principal, un postre, una copa de vino y servicio de agua.

H: ¿Qué significa para vos ser una cocinera del vino?

PSR: Ser cocinero en una bodega es un gran privilegio y estar en contacto con enólogos lo es mucho más. Y creo que cocinarle a la gente de tu tierra es maravilloso, por eso me intereso en  que los mendocinos vengan a comer a nuestro lugar.  

H: ¿Te sentís más cocinera o artista plástica?   

PSR: Soy las dos cosas. La verdad es que no puedo vivir sin el arte y la cocina. Por razones obvias le dedico más tiempo a la cocina, pero a mis días francos los paso en mi taller.

COCINEROS MENDOCINOS

H: ¿Por qué se les ocurrió conformar la Asociación de Cocineros Mendoza?

PSR: El puntapié inicial fue el programa “Rutas Gastronómicas” que se creó a través del ministerio de Turismo de este gobierno. Eso hizo que empezáramos a reunirnos varios chef de la provincia y se generó muy buena onda. Yo coordinaba las zonas Maipú y Luján y empezamos a generar relaciones. Sobre todo empecé a consultar mucho a Pablo Del Río y ahí comenzó a surgir la idea. Un abogado amigo nos sugirió crear una asociación y empezamos a trabajar. Sumamos a gente que consideramos era laburante y llevaba adelante la gastronomía. Sobre todo si trabajaban en bodegas y estaban relacionados con el vino. De a poco nos empezamos a reunir y a todos les gustó la idea.

H: ¿Qué es lo mejor de CO.ME?

PSR: Creo que lo mejor es que ideamos algo y lo estamos concretando. Actualmente nos apoyan profesionales de distintos ámbitos que aportan su granito de arena para que esto se siga desarrollando. Y además todos nosotros trabajamos semana a semana para seguir concretando los proyectos de la asociación. Todos hacemos esto ad honorem. Básicamente la idea es difundir la gastronomía de la provincia.

H: ¿También intentarán alinear la gastronomía mendocina no?

PSR: Yo diría que vamos a intentar mejorar la gastronomía desde diversos aspectos. La tarea que tiene CO.ME por delante es enorme. Queremos que nuestra institución trascienda en el tiempo, a pesar de que estamos convencidos de que nos falta mucho camino por transitar. Pero queremos que la gente pise Mendoza y se sorprenda por todo lo que puede ofrecerle nuestra gastronomía.

H: ¿Alguna vez imaginaste que ibas a llegar a ocupar el lugar que tenés hoy dentro de la gastronomía de la provincia?





























PSR: No, ni en el mejor sueño. Originalmente fue mi segunda vocación, pero creo que al final está claro que tenía que dedicarme a la cocina.










Ping Pong

Restaurante favorito: El que está por abrir Darío Gualtieri en Buenos Aires.

Comida Favorita: Empanadas y ojo de bife.

Un vino: Cabernet Franc.

Signo: Cáncer.

Hincha de: River. 

Programa de TV favorito: No veo mucha televisión.

Una marca de ropa: Vitamina.

¿Quién era tu ídolo cuando eras chica?: Elvis Presley.

 ¿Cúantos seguidores tenés en facebook?: 765.


















Un destino para vacacionar: Mi taller.