Hipopresivos, los abdominales súper efectivos que se instalan en Mendoza

Los abdominales tradicionales forman parte de la mayoría de los entrenamientos, pero no significa que sean totalmente recomendables para el cuerpo, ya que se ha estudiado que aumentan la presión intraabdominal. Hace varios años que en otras partes del mundo se realizan abdominales hipopresivos, una técnica muy saludable que poco a poco se va instalando […]


Los abdominales tradicionales forman parte de la mayoría de los entrenamientos, pero no significa que sean totalmente recomendables para el cuerpo, ya que se ha estudiado que aumentan la presión intraabdominal.


Hace varios años que en otras partes del mundo se realizan abdominales hipopresivos, una técnica muy saludable que poco a poco se va instalando en Mendoza, sobre todo, en deportistas y en quienes practican alguna actividad física.


Si bien los ejercicios hipopresivos los creó Marcel Caufriez con el objetivo de hacer rehabilitaciones en ciertas partes del cuerpo, se ha comprobado que aportan muchísimos beneficios en distintas zonas del organismo.


Para conocer los detalles sobre este método que cada vez lo eligen más personas por su efectividad, conversamos con la Lic. en Kinesiología Cristina Kahr, especialista y dedicada al tema.


Con los abdominales hipopresivos se trabaja principalmente el abdomen, la postura, y el suelo pélvico, que contiene los órganos. Mientras que el 70% de las fibras del abdomen son de trabajo involuntario,  el 30% son de trabajo voluntario, es decir, que cuando realizamos abdominales tradicionales solo trabajamos el 30% del músculo, mientras que con los hipopresivos se trabaja el 70%, ¡gran diferencia!


Con los hipopresivos se observan excelentes resultados para reducir la cintura y sirven para prevenir hernias e incontinencia urinaria (que es muy común en las deportistas), aumenta la capacidad respiratoria, incrementa el rendimiento deportivo, disminuye los edemas y mejora la circulación, la postura y la función sexual.


Es necesario aprender la técnica durante un mes con un profesional, ya sea kinesiólogo, profesor de educación física o instructor de pilates, luego, en el segundo mes se trabaja para lograr los objetivos, como por ejemplo, reducir la cintura, y a partir del tercer mes, se empieza con el mantenimiento, que se puede continuar con el experto o de forma independiente.


Lo ideal es hacer hipopresivos dos veces por semana durante 20 a 35 minutos como complemento de la actividad física. No es difícil, solo tenés que aprender bien la técnica, ser constante y verás los resultados de estos abdominales que benefician a muchas partes del cuerpo.